A pesar del incremento de precio del aceite de oliva, éste continúa siendo un ingrediente imprescindible en las cocinas de bares y restaurantes de nuestro país. Pero el precio no es el único quebradero de cabeza para muchos restauradores. La correcta gestión de aceites y grasas en procesos de cocción como en las frituras es una verdadera responsabilidad para la cocina. Bares y restaurantes se enfrentan a diario a problemas como derrames, malos olores y obstrucciones de tuberías si no hacen una buena gestión de los residuos de aceite. Estos residuos líquidos y grasos, si no se contienen correctamente, pueden contaminar suelos y aguas, causando daños medioambientales y riesgos para el personal. De hecho, un solo litro de aceite usado puede llegar a contaminar hasta 40.000 litros de agua, siendo 5.000 veces más contaminante que el agua residual.
En nuestro artículo de hoy, desde PlasticBag, hablaremos sobre la importancia de la (buena) gestión de los aceites en la hostelería.
En la gestión de aceites y grasas, uno de los principales desafíos es el uso de bolsas inadecuadas. Muchas bolsas de baja calidad se rompen con facilidad, permitiendo que el aceite traspase y manche todo a su alrededor. En definitiva, el mercado está lleno de bolsas de mala calidad o que se usan de manera incorrecta para estos residuos. Los vertidos accidentales no solo crean problemas de higiene, sino que también representan un peligro para la seguridad del personal de cocina y pueden resultar en multas por mala gestión de residuos. Por eso, es crucial utilizar bolsas como las de PlasticBag, diseñadas específicamente para contener residuos líquidos y grasos. Estas bolsas están perfectamente selladas, son resistentes a pinchazos y roturas, y están fabricadas con plástico reciclable mediante prácticas sostenibles.
Problemas comunes en la gestión de aceites y grasas con bolsas de basura:
Es esencial elegir bolsas fabricadas con materiales de alta resistencia y densidad, como las bolsas de Plasticbag, que evitan roturas incluso al manejar residuos grasos y líquidos. Su impermeabilidad garantiza que los aceites no se filtren, protegiendo el entorno y facilitando el transporte seguro. Además, los sistemas de cierre eficiente evitan fugas, asegurando una gestión eficiente y limpia de los residuos.
Para más información sobre cómo Plasticbag puede mejorar la sostenibilidad en la hostelería, consulta nuestro artículo "Las ventajas del uso de bolsas de plástico recicladas en la industria de la hostelería".
Para resumir, estas son las características clave de las bolsas de basura adecuadas para aceites y grasas usadas:
El uso de contenedores adecuados para almacenar aceite que proviene de freidoras y demás, la correcta refrigeración del aceite y la filtración regular son medidas que debes adoptar ya que no solo protegen la cocina de tu negocio, sino que también ayudan a reducir los tiempos de mantenimiento y limpieza de la propia cocina.
Te recomendamos establecer un protocolo de recogida de residuos en tu restaurante y mantener un registro detallado para cumplir con las normativas y garantizar una gestión eficiente del aceite usado.
Una buena opción es colaborar con empresas de servicios especializados de recogida de aceite, a menudo pueden parecer un coste innecesario, pero te ahorrarás tiempo y a la larga dinero.
Elegir bolsas de basura resistentes y adecuadas, como las de Plasticbag, es fundamental para una gestión segura de aceites y grasas. Recuerda que lo más importante es comprobar el grosor y el grado de impermeabilidad de las bolsas, así como también su cierre, pensado para contener líquidos.
Si quieres saber más sobre bolsas de plástico recicladas diseñadas para el colectivo de la hostelería y la restauración no esperes más. Contacta con nuestro equipo comercial y te asesorará. Y, recuerda, en PlasticBag somos los fabricantes de las bolsas del futuro.