Las empresas españolas están integrando cada vez más la gestión sostenible de residuos como parte fundamental de sus estrategias de Responsabilidad Social Corporativa (RSC). Así lo reflejan diversos informes y estudios recientes que apuntan a un compromiso creciente de prácticas medioambientales responsables, en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Según datos recogidos por Residuos Profesional, el 83% de las empresas españolas considera la eficiencia energética y la gestión de residuos como las principales medidas para mejorar su sostenibilidad. De hecho, el 42% de las compañías en España ya publican informes de sostenibilidad, superando la media de la Eurozona, situada en un 28%, lo que evidencia un avance en transparencia y responsabilidad ambiental.
En términos de inversión, las empresas españolas destinaron en 2020 más de 1.486 millones de euros a iniciativas de RSC, con un aumento del 8% en el gasto medio por empresa respecto al año anterior. El dato evidencia una apuesta firme por estrategias empresariales más sostenibles. Desde PlasticBag, el fabricante de bolsas de plástico del futuro estamos muy atentos a la actualidad en materia de Responsabilidad Social Corporativa y Medio Ambiente. Por esto, en nuestro artículo de hoy, queremos mostrarte como la gestión de residuos puede ser clave en la implementación de una estrategia RSC en las empresas. Te contamos cómo…
Aunque las cifras son buenas aún persisten retos e importantes desafíos en nuestro país. Por ejemplo, en materia de transparencia y comunicación. Un estudio del Observatorio de RSC reveló que solo cuatro empresas del IBEX 35 superan los 50 puntos sobre 100 en transparencia sobre sus políticas de RSC, lo que pone de manifiesto la necesidad de mejorar la rendición de cuentas en áreas como la gestión de residuos.
Pero, ¿qué otros desafíos tienen aún muchas compañías en materia de gestión de residuos en el marco de su estrategia RSC? ¡Toma nota!:
• Desperdicio de recursos: No contar con políticas internas para minimizar residuos genera un uso ineficiente de materiales y recursos valiosos.
• Falta de segregación de residuos: Una separación incorrecta impide el reciclaje o la reutilización, y puede derivar en mayores costes de tratamiento.
• Costes operativos elevados: La gestión ineficiente implica más recogidas, más logística y mayor gasto en eliminación de residuos.
• Cumplimiento normativo: Las regulaciones ambientales son cada vez más exigentes. No adaptarse puede implicar sanciones económicas y pérdida de competitividad.
En conjunto, los datos muestran que la RSC en España no solo es una tendencia en crecimiento, sino también una herramienta clave para mejorar la eficiencia, cumplir con la normativa ambiental y reforzar la imagen de marca de las empresas ante la sociedad.
Para dar un paso real hacia la sostenibilidad, las empresas pueden aplicar estrategias concretas como:
Como señalamos en uno de nuestros artículos de nuestro blog “Fiscalidad verde: beneficios de ser una empresa sostenible en España” una gestión eficiente de residuos no solo mejora el planeta, también mejora las cuentas de explotación de tu compañía:
En España, por ejemplo, empresas del sector textil se han asociado para gestionar el residuo textil: Decathlon, H&M, Inditex, Kiabi, Mango y Tendam han creado la Asociación para la Gestión del Residuo Textil, con el objetivo de gestionar los residuos textiles y de calzado que se generen en la fabricación de sus prendas.
Otro caso es el de Ikea. IKEA ha integrado en toda Europa la gestión de residuos en su estrategia de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) mediante un enfoque de economía circular y sostenibilidad. La empresa busca transformar su modelo de negocio para minimizar la generación de residuos y maximizar la reutilización de materiales. Una de las iniciativas destacadas es la recompra de muebles usados a sus clientes, permitiendo dar una segunda vida a estos productos y fomentando la economía circular.
Además, IKEA ha invertido en soluciones de reciclaje para gestionar de manera eficiente los productos desechados, como muebles y colchones. Recientemente, el grupo Ingka, el mayor minorista de IKEA, anunció una inversión de 1.000 millones de euros en empresas de reciclaje, con el objetivo de mejorar la gestión de residuos y avanzar hacia su meta de reciclar tantos productos como los que vende para 2030.
Integrar una gestión inteligente y sostenible de residuos en la estrategia de RSC no es solo una buena práctica, es una decisión estratégica. Optimiza recursos, reduce costes, mejora el posicionamiento de marca y contribuye a un futuro mejor.
Numerosas compañías ya han dado el paso:
En PlasticBag, diseñamos soluciones adaptadas para empresas que quieren dar el paso hacia una gestión de residuos más eficiente. Desde bolsas recicladas hasta formatos personalizados para tu sector, te acompañamos en tu compromiso con el planeta. Contacta con nosotros y descubre cómo convertir tus residuos en una oportunidad de valor y reputación. Y, recuerda, ¡PlasticBag es el fabricante de bolsas del futuro!